Sin importar de qué se trate, la comodidad es importante. Así como un buen par de tenis puede marcar la diferencia entre sufrir una lesión deportiva o no, calzar guantes de bateo adecuados para el estilo de juego y medida del bateador, forma parte de los preparativos clave para dar un buen partido y obtener los resultados deseados.
La historia de los guantes de bateo se remonta a fines de la década de 1940, cuando Bobby Thomson, jugador de los Giants de San Francisco en Estados Unidos, empezó a utilizarlos durante los entrenamientos de pretemporada, para lograr un mejor agarre del bate y tener más control en el swing.
Luego, por recomendación de su mánager, Ted Williams los probó durante la práctica de bateo en la temporada de 1953, después de desarrollar ampollas en las manos.
Fue hasta la década de 1960 cuando el uso de guantes de bateo se popularizó entre los jugadores convirtiéndose en un accesorio común, que sigue vigente. En la actualidad, para muchos beisbolistas los guantes son imprescindibles, mientras que otros los portan sólo en algunas ocasiones.
Las dos razones principales para usar guantes de bateo son el agarre y la protección que brindan al sostener el bate. Hay algunas marcas que tienen un exterior pegajoso en las palmas, lo cual ayuda a tener un mejor control al colocar el bate, y que son especialmente útiles cuando el bateador está lidiando con malas condiciones climáticas, en las que sus manos pueden mojarse y resbalarse y proporcionar más agarre.
Durante la práctica, balancear un bate y hacer contacto puede dañar las manos del bateador. Las ampollas, cortes y desgarros suelen aparecer en función de la forma en la que cada jugador sostiene el bate. Mención aparte merece el hecho de que usar los guantes aún cuando nunca antes se han sufrido lesiones de este tipo, es una excelente forma de prevenir el dolor y la fatiga muscular luego de la práctica deportiva, tal y como lo hacen las espinilleras y las protecciones para los pies en esas partes del cuerpo.
Aún con la protección que brindan, la discusión sobre si deberían o no usarse sigue rodeando a esta indumentaria deportiva. Así que, cuando te preguntes si realmente necesitas usarlos, la respuesta es que todo depende de ti.
Si crees que el agarre que ya tiene el bate es suficiente para proteger tus manos, puedes omitirlos. Pero si tu piel es frágil o estás usando un bate que no tiene un gran agarre, los guantes de bateo pueden funcionar como una barrera protectora para tus manos, manteniéndolas protegidas y ayudándote a tener un mejor desempeño.
Esto es especialmente importante para los niños, quienes deben prevenir todos los posibles daños. Si deseas que tu hijo se desarrolle adecuadamente como bateador, debe poder hacer swings constantemente, practicar y jugar en los partidos.
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